viernes, 23 de diciembre de 2011

El porqué de follarte en el suelo

Sé perfectamente como me cambia la mirada, mis ojos tornan la cercanía en lascivia, el deseo en perversión y el cariño en vicio, pasan de un estado a otro en décimas de segundo, un mero pensamiento o un simple movimiento de tus caderas puede provocar el cambio; de la misma manera sé como tú lo notas sin desviar tus ojos de los míos te relames por dentro conocedora del significado, que sólo quiero de ti a la puta. Entonces me acerco a ti con el paso más firme que de costumbre, caminando hasta pegarme a ti para que notes tu cuerpo invadido por el mio y llevo mi mano a tus cabellos desde atrás enredando mis dedos en ellos pareciendo que te voy a besar, siempre piensas que te besaré sin embargo en ese momento cierro mis dedos entre tus cabellos tirando de ellos con fuerza estirándote el cuello haciéndote apretar los dientes, en ese momento siempre piensas "cabrón", pero no lo dices, te lo tragas junto con tu orgullo y el coño ya lo tienes mojado, y en ese momento es en el que te beso como nadie más sabe hacerlo, porque nadie sabe hacer sentir puta y reina en el mismo beso. Mientras te estoy besando vuelvo a tirar de tu pelo sin detenerme esta vez, jalando de ellos para arrastrarte a ti, hasta llevarte al suelo. De rodillas, siempre quiero que primero estés de rodillas. Me gusta como cada vez que adoptas tu posición te lanzas ávida a por Mi Polla, ansiosa y cerda luchas por abrirte paso hasta Mi Polla para metértela en la boca, aún disfruto más dejando que te acerques un poco a tu objetivo sabiendo que esa vez no tendrás permitido ninguna lamida y como sigo teniéndote agarrada del pelo cuando veo en tu rostro la alegría de quien cree que tendrá lo que desea vuelvo a tirar de tu pelo para arrastrarte a ti, hasta tenerte a cuatro patas. Y entonces te follo. Por eso no llevas bragas, porque hay momentos en los que no quiero esperar. Disfruto de tener tus rodillas incadas en el suelo y de meterte la polla tan fuerte que hasta me duelan las folladas porque así es como más se moja tu coño, hasta gotear. Porque tu eres una perra y montarte como tal te hace gotear sobre el suelo y lo mejor de joderte sobre el suelo es correrte y tirar de tu pelo para arrastrarte a ti, hasta hacer que recojas tu corrida... con la lengua.

martes, 6 de diciembre de 2011

El Dominante de las navidades pasadas

-    Buenas noches….
-    Vaya, hacía tiempo que te esperaba.
-    A mí?
-    Sí, después de la anterior visita que recibí, era un clásico que tú aparecieras y como yo soy tan de clásicos, pues tenías que a parecer tarde o temprano.
-    Ahora me doy cuenta que es totalmente cierto eso que dice que la gente que a veces soy insoportable… somos insoportables.
-    (Ríe) Sí eso lo descubrí hace tiempo, pero sabes qué… me gusta tener un punto insoportable porque gracias a él espanto a la gente que no me interesa.
-    Ya… pues quizás deberías guardarte ese puntito tan desagradable más a menudo, y por cierto estás más calvo… no?
-    (Sonríe) Que cabrón… No te veo mucho más pelo que a mí, sin embargo al verte me doy cuenta que merecen la pena las horas de gimnasio.
-    ¿Gimnasio? Con la de veces que he dicho que nunca pisaría uno tú vas y me dejas en mal lugar.
-    No puedo respetar todas las tonterías que se te ocurran decir…
-    Entonces he hecho bien en venir a visitarte.
-    Tu “primo” el del futuro vino a avisarme sobre el Bdsm, ¿tú vienes a decirme que lo deje?
-    Mmmm… no. ¿Por qué iba a venir para eso? Con lo que estoy disfrutando conociéndolo, además seguro que tú sabes mucho mejor que yo el único motivo por el que lo dejaríamos y si mi información es correcta estas lejísimos de ese que pueda presentarse ese motivo.
-    ¿Y a qué has venido?
-    Porque hay ciertas cosas que no me gustan nada.
-    No creo que tengas ni puta idea, tú ni siquiera sabes hacer un nudo y cuando azotas lo haces hasta con miedo.
-    ¿Voy a aprender a hacer bondage?
-    Sí, y no se me da nada mal, atarás a muchas más personas de las que crees.
-    ¿Personas? Espero que quieras decir mujeres…
-    (Risas) Sabes a que le estoy cogiendo mucho gusto últimamente… A poner a una perra de rodillas, hacer que mame y golpearle la cara mientras lo hace.
-    Entonces ahora soy capaz de hacer un bondage, azoto con contundencia, manejo las formas y realmente hago sentirse a una mujer usada… ¿Y en que momento perdiste mí espíritu?
-    No te parece que pude perderlo el mismo día que superé tu gran miedo…
-    ¿Y crees que merece la pena?
-    Lo que creo es que tienes sobrevalorado ese supuesto espíritu. Y deberías estar orgulloso de que ya el miedo a la soledad no nos coarte, porque eso nos ha hecho ser aún seguro y mucho mejor Dominante.
-    ¿Y mejor persona?
-    Siempre hemos sido buena persona.
-    Es muy bueno superar los miedo que limitan a uno mismo, sin embargo son esos límites los que a veces nos hacen ser más humanos. Es cierto me cuesta demasiado lidiar con la soledad y su mera sombra me bloquea en ocasiones, soy consciente de que la has logrado superar a base de desencantos y fuerza. Eres mucho más fuerte y probablemente más listo pero las murallas que levantaste para poder vencer a la soledad están impidiendo que otras muchas cosas importantes lleguen hasta ti, eso te esta haciendo perder la mirada con que hemos visto la vida desde el día que crecimos y comenzamos a decidir que era importante, que era fundamental y que importaba muy poco. Esa sensación amable y cercana que inculcabas en las personas se esta disipando… dominante absurdo (dicho con rintintín)
-    Me parece un nombre perfecto.
-    Es perfecto cuando ambas conceptos se mantienen equilibrados, cuando el dominante es absurdo, perder esa absurdez te puede hacer más imponente sin embargo a los ojos que importan te empequeñeces.
-    Y estoy llegando al colmo de la prepotencia… mi segunda conversación… conmigo mismo.
-    Culpa tuya
-    Pero cual es el problema exactamente, he superado nuestro gran miedo, soy una persona mas segura y las sombras que apretaban mi mente las he disipado a base de cañonazos de luz…
-    Ibas a decir… mas segura e independiente…
-    Siempre hemos sido bastante independientes.
-    Sí, pero serlo más sobrepasa el límite aceptable. No es que estés haciendo las cosas mal, sino que la nueva manera en que las afrontas es demasiado fría y distante. Yo no soy así.
-    Y si yo sí soy así. Distante y frío, más objetivo y menos pasional, porqué siempre hay que tirarse a la piscina.
-    Desde cuándo le tienes miedo a tirarte a la piscina… es lo que has hecho toda tu vida y siempre ha tenido agua, más o menos pero siempre has tenido para un pequeño chapuzón como poco…
-    No tengo miedo a tirarme a la piscina.
-    ¿Por qué dejar de hacerlo entonces?
-    Porque no es necesario…
-    ¡Nosotros siempre vamos a hacer lo que queramos sin importarnos la dificultad!
-    (Silencio)
-    Es genial lo que soy capaz de hacer ahora pero no olvides la máxima que te ha traído hasta aquí. Las cosas siempre han ido bien, pero no porque siempre salieran bien sino porque era lo que querías hacer, porque vencieras o no llegabas hasta el final, hasta la extenuación, y seguimos siendo igual de cabezotas así que no lo utilices sólo como un defecto, sigue utilizándolo como una virtud. ¿Eres capaz de mantener lo que yo tengo y lo que has conseguido tú?
-    No sé si quiero lo que implica lo que tienes tú, no sé si quiero lo que implica creer en ciertas cosas y en ciertas personas…
-    Entonces eres consciente…
-    No de manera tan clara como tú, si no supongo que no estarías aquí.
-    No he venido aquí para elegir el camino por ti, ni a imponerte uno… entre otras cosas porqué no puedo hacerlo… (ríe)
-    (Sonrisa de medio lado)
-    Yo sólo venía para que fueras consciente… bueno y para hacer que pensaras como yo, pero eso es algo que hacemos constantemente (sonríe). Que lo siguiente a conseguir sea la constancia me parece una buena idea…
-    De eso vamos chungos los dos.
-    Si tú todavía no lo has conseguido es que yo no he tenido mucho éxito.
-    No tuviste mucho, no… (ríe).
-    Bueno… ya poco puedo hacer aquí así que terminemos con este arrebato de prepotencia…
-    … esperemos que no gratuíta… (le guiña un ojo)
-    (Risas)
-    (Risas)

domingo, 27 de noviembre de 2011

¿Qué eres tú?

La mujer que tenía ante él estaba casada, sería cuatro o cinco años mayor, le resultaba atractiva y ya estaba postrada de rodillas; como le había dicho tenía el coño completamente rasurado, decidió hacia tiempo que no follaría ningún coño que no estuviera debidamente rasurado por puta que fuera la mujer que lo portaba. La había esperado sentado en un sillón grande y cómodo que había colocado en el centro de la estancia, la cual había vaciado de objetos dejando sólo el sillón; la escasa luz únicamente partía de un punto y estaba dirigida hacia la mujer postrada, provocando un ambiente oscuro en el resto de la habitación, en medio de aquella oscuridad mirándola inquisitoriamente estaba él aunque ella apenas era capaz de mantener la cabeza erguida un par de segundos seguidos.

¿Por qué estas aquí perra?
Porque no hay nada que desee más, Señor

¿Por qué estas postrada perra?
Porque es mi lugar, Señor.

¿Qué dijiste la primera vez que hablamos perra?
Que podría ser muy puta pero nunca me pondría de rodillas para nadie, Señor

¿Y cómo estas ahora mismo perra?
Postrada ante ti, Señor.

Él disfrutaba de ver la rabia contenida en el rostro de la mujer que irracionalmente, para ella, acrecentaba su deseo ante cada palabra; llegó vestida tal y como le había ordenado, falda corta, camisa blanca, medias a medio muslo y sin bragas; una mujer tan perra debía llevar el coño expuesto ante Él. Sin siquiera decirle nada, ella al cruzar sus ojos con los de Él, se detuvo delante del sillón sobre el que estaba sentado y se desnudo completamente, de manera lenta refrenando toda su ansia; desnuda, de pie con las piernas separadas, Él había hecho mucho hincapié en que siempre tuviera las piernas separadas como gesto de exposición de su coño, al volver a cruzar su mirada con la de Él no pudo aguantarlo más y se postró.

¿Cómo tienes el coño perra?
Mojado, Señor.

¿No hace falta ni que te roce perra?
No, Señor. Soy así de fácil para usted.

¿Qué eres tú?
Un sumisa, Señor

¿Qué es una mujer que se postra y se moja sin que siquiera tenga que hablar?
Una puta, Señor…
Una zorra, Señor…
No reconoceré esa palabra, Señor, ya se lo dije.

Coloca tu mano sobre tu coño perra. Sin moverla, apriétalo.

ella no pudo tragarse el gemido aunque lo intentó al colocar la mano tal y como le había ordenado; la mujer que tenía delante estaba muy excitada, con sus fluidos resbalando por los muslos,  deseaba pajearse de manera desesperada pero no lo haría. ella no haría nada que Él no le ordenase. Se levantó con una vara en la mano, caminaba alrededor de la mujer hasta detenerse a su espalda; los primeros azotes con la vara fueron muy dolorosos pero llego un momento en que el coño le palpitaba tanto que no era capaz de discernir con claridad.

¿Estas caliente perra?
Mucho, Señor.

¿Qué eres tú?
Una zorra, Señor

Pajeate perra.
Fuerte perra, sin concesiones en ese coño.

Mientras ella se pajeaba de manera casi violenta Él siguió azotándola a intervalos en las nalgas; estaba tan caliente que a los pocos minutos la mujer que tenía delante sintió como el cuerpo se le tensaba en un arrebato inconsciente señal del comienzo del orgasmo.

Para, perra.

Por favor… Señor…

¿Qué eres tú?


Pajeate perra.
Fuerte, perra.
Más
Para, perra.

Volvió a pararla en el momento que el orgasmo comenzaba; ella tenía la mente colapsada, quería correrse, necesitaba terminar, pero no movería la mano a menos que se lo permitiese Él; pasados unos minutos en los que azotó sus pezones ordenó a la mujer que tenía delante que volvería a pajearse; ella lo hacía tan fuerte como nunca en su vida y cuando pensaba que le permitiría correrse la ordenó parar; no controlaba sus orgasmos, ya no eran suyos.

Pajeate perra.
Ya no aguantas ni tres pajeadas perra…

No, Señor. No puedo más.

Y por qué no te corres perra…

Porque usted no me lo permite.

Y una mujer que no se corre cuando quiere sino cuando se lo permiten… ¿Qué es?


Una perra, Señor.

¿Qué eres tu?

Una perra, Señor.
Soy una perra.

martes, 15 de noviembre de 2011

Un año más tarde

Un año después vuelvo a hacerme este cuestionario...


¿Es un Dominante un hombre normal?
No

¿Puede alguien dejar de ser Dominante?
Todo puede cambiar en esta vida.

¿Me apetece usar a alguien que no considere Mía sino simplemente sea para una sesión?
Desde luego.

¿Puede o debe un Dominante sufrir por una sumisa?
Puede, debe y es muy probable que lo haga.

¿Puede un  Dominante llorar?
Esperemos que sí, porque sino que clase de persona sería.

¿Dónde acaba el hombre y empieza el Dominante?
Mira que hago preguntas gilipollas...

¿Soy dos o soy uno sólo?
Uno.

¿Debe un Dominante amar a Su sumisa y compaginar la vida vainilla con la vida de Dominanción/sumisión?
Si ambos son capaces de sobrellevar ambas circunstancias, adelante. Suena bonito. Aunque no sé si realizable. Personalmente conozco un ejemplo y desde luego son eso UN EJEMPLO.

¿Deben ser las sumisas mujeres con carácter fuerte?
Siempre, condición indispensable, en mi humilde opinión

¿Hasta que punto un Dominante debe entrar en la vida de una sumisa?
Hasta el que entre ambos consideren oportuno.

¿He cambiado?
Bastante

¿Sigo siendo un novato?
No

¿Tienen equivalencias una relación Bdsm  con una relación vainilla?
Algunas, aunque cada vez le veo menos.

¿Soy sádico?
Sí, cada día más.

¿Quiero una sumisa masoca o sólo a alguien masoca a la que usar?
Realmente ahora mismo me da un poco igual., así que masoca a la que usar.

¿Cuál es el mejor lugar para encontrar a una sumisa?
Internet

¿Necesito domar a alguien?
No lo necesito, pero gusta hacerlo.

¿Cuál es mi práctica favorita?
Yo soy de los que prefiere mezclarlas.

¿Realmente necesito o quiero tener una sumisa?
Necesitarlo, no lo necesito, querer... ahora mismo con divertirme me es suficiente.

¿Es normal practicar Bdsm o somos un poco desiquilibrados?
Somos desiquilibrados.

¿Quiero seguir el camino en el Bdsm?
Yo sigo mi camino a veces me trae algo de Bdsm muchas más veces lo deja a un lado.

¿Cómo lo verían mis conocidos vainillas?
Me da igual porque no lo van a saber

¿Puede un Dominante dudar?
El ignorante afirma, el sabio duda. Depende del tipo de Dominante que sea.

¿Sería lo mejor separar y tener dos vidas?
Estoy loco pero no soy esquizofrénico. Una vida por favor.

¿Volveré a un local Bdsm?
Sí, seguro

¿Realmente pertenezco al mundo del Bdsm?
No, nunca me he sentido parte de él.

¿Soy una buena persona?
Espero serlo.

¿Me merezco ser feliz?
Todo el mundo merece ser feliz. Yo quizás más que otros.

¿Me enamoraría?
Más pronto que tarde.

¿Soy feliz?
Ahora mismo estoy en el camino de volver a serlo.



domingo, 13 de noviembre de 2011

Obligaciones del coño

Un coño debe estar siempre rasurado, con ese aspecto suave e inmaculado que se forma en la entrepierna de una mujer cuando esta totalmente libre de pelo. Flanqueado por dos caderas ligeramente marcadas que moldeen la parte baja del vientre como un camino delicioso hasta la raja. Tener un ancho que oscile entre tres y cuatro dedos, para que cuando la mujer vista un pantalón ceñido y cierre las piernas se cree un arco entre la parte alta de sus muslos, un hueco gracias al cual se pueda intuir con un rápido golpe de vista, sin embargo nunca debe llevar una prenda tan ceñida que refleje el contorno de sus labios. Debe estar cuidado, limpio, regularmente pajeado y bien vestido, sabiendo cuando llevar tanga, braga o simplemente nada, atendiendo a la situación y polla que tenga a su lado.
Un coño debe tener el clítorix proviniente, lo suficiente para poder mamarlo  con los labios e introducir la punta en la boca para saborearlo; de un tamaño manoseable que se pueda pajear con más de un dedo a la vez, con el punto de placer oculto entre sus pliegues para que no todas las manos puedan correrlo. Los labios carnosos, de manera que al separarlos con los dedos den la sensación de estar abriéndose, gruesos y sensibles para pinzarlos al gusto, que cubran un agujero caliente, fácil de penetrar, en el que quepan tres dedos sin dificultad y hasta un puño si es trabajado con presteza. Agujero profundo ansioso de ser follado e incluso jodido, a cuatro patas mejor.
Un coño debe humedecerse sin necesitar más que una caricia correcta, una palabra adecuada o una mirada inquisitoria. No atender a remilgos ni prejuicios, ser abierto, lascivo y caliente, atender a su deseo por encima de convenciones sociales o normas anticuadas de conducta. Estar listo para ser penetrado en cualquier lugar. Sus fluidos, babosos y dulces, derramarse por la parte superior de los muslos y el culo de la mujer empapando el interior de sus nalgas, para que al follarlo desde atrás notar el abdomen mojarse al chocar con ellas. Recibir una polla fuerte, muy fuerte, y rogar porque la siguente embestida sea aún más profunda; que al correrse con una polla dentro de él no necesite sacarla.
Un coño debe saber ser elegante cuando la situación lo precisa aunque pertenezca a una puta. Elegir con esquisitez las pollas que lo llegaran a follar. Discreto y fiel, lo suificientemente listo para enamorarse de la polla correcta. Valiente, cuclillero y chillón, con la personalidad suficiente para ponerse encima y hacer disfrutar.  Un coño, sumiso o no, debe querer follar tanto o más que una polla.

lunes, 7 de noviembre de 2011

Historias

Él no viajaba mucho en metro, pero siempre que lo hacía se agarraba con una mano a la barra pero no de manera muy firme para dejar que el leve vaivén del vagón lo meciera, le resultaba agradable. En los últimos tiempos había descubierto el placer de leer en cualquier lugar y momento, aunque fueran unas líneas. Estaba sumido en su lectura, por mucho que sucediera a su alrededor era difícil que subiera los ojos de las páginas por largo que fuera el trayecto.
 
Aquella mañana enfrascado en la historia de un niño llamado Alvin Maker un olor le hizo subir la vista. Palabra a palabra daban forma a una historia que lo tenia conmovido y en un instante todo el vagón se lleno de un olor distinto, suave, agradable. Como una nube que iba exparciendonse libremente por el vagón cambiando el color gris por un tono rojizo tirando a rosa. Eso fue lo que sintió antes de subir los ojos.

Al subirlos la encontró a ella, era perfecta. Llevaba un pantalón vaquero muy ceñido que marcaba las sensuales curvas de sus piernas que terminaban en un culo redondo y apretado predominante pero nada voluptuoso. Estaba de espaldas a él, podía observar su figura que se formaba debajo de su abrigo de tela de paño oscuro, atado en la cintura resaltado la finura de esta en contraposición con las caderas, mientras que  su pelo negro caía en tirabuzones desordenados sobre sus hombros.

En la siguiente parada entraron varias personas lo que hizo que ella tuviera que colocarse a su lado y a llegar hasta él su aroma volvió a envolverle impidiéndole regresar al libro. Por fin vio su rostro, de ojos oscuros, expresivos, distraídos y con un corte que los hacía parecer algo tristes. Era un rostro sencillo pero bello, de líneas finas y armónicas, nada era reseñable en él sin embargo todo le parecía bonito.

Buscó su mirada un par de veces pero los ojos de ella estaban perdidos en el mar de los pensamientos. Cada parada de metro es un oportunidad de que saliera y seguro que no volvería a verla jamás, hizo el ademán de hablarle hasta que se dio cuenta de que era una idea absurda. Sin embargo aquella sensación especial no se le pasaba. Desde su último viaje, más allá del oceano, había adquirido la constumbre de que cada vez que sentía la necesidad de escribir simplemente lo hacía, un papel arrugado, su nueva compañera moleskine o en el mismo móvil. Muchas veces esos arrebatos acaban en líneas inconexas o principios de textos nunca terminados, la constancia no era uno de sus dones.

En esta ocasión no contaba con papel ni bolígrafo así que se puso a escribir directamente en su móvil. Las paradas se sucedían sin que ninguno de los dos se bajara del vagón, él al final de cada párrafo levantaba la mirada, cada vez de manera menos disimulada, y buscaba sus ojos pero estabán tan perdidos que creyó que nunca regresarían a la realidad. Y terminó un nuevo párrafo. Y levantó la mirada.

Ahí habían estado sus ojos, ya estaban allí cuando los suyos llegaron. Fue un instante o muchos instantes juntos pero no pasó nada más que una mirada coqueta que no podía ser eterna y que terminó. La voz autómata del metro anuncio que la siguiente era su parada, regresó a sus párrafos escribiendo de manera desordenada. El tren se detuvo, "estación en curva cuidado al salir no meter el pie entre coche y andén", sin levantar la mirada del móvil, escribiendo, salió del vagón sabiendo que no volvería a verla, que podría darse la vuelta y volver a entrar...

Se dio la vuelta... Hola me llamo Manu.

lunes, 31 de octubre de 2011

El placer de atar

Pensar, imaginar, degustar y decidir que clase de bondage vas ha realizar.

Tener un cuerpo que deseas, expectante y nervioso, desnudo para  Ti.

Oler las cuerdas largamente guardadas.

Vendar los ojos reduciendo su realidad a Tus Manos.

Acariciar un cuerpo de igual manera con tus manos y tus cuerdas.

Trenzar cuerdas creando formas… bellas, sinuosas, lascivas, secretas.

Sentir como un cuerpo se eriza al hacerse tuyo a través de la inmovilización.

Llegar hasta un coño y encontrarlo completamente húmedo de la mera sensación que le provocan tus cuerdas.

Anudar ese coño mojado, abierto y apretado por tus cuerdas.

Terminar el último nudo cerrando los dibujos creados sobre la piel desnuda.

Inmovilizar completamente un cuerpo.

Atar a un mujer que ni siquiera se siente sumisa.

Saber que puedes hacer con ese cuerpo lo que desearas.

Azotar un cuerpo inmovilizado y expuesto.

Follar un cuerpo atado, inmovilizado.

Sentir sobre tu piel como le aprietan tus cuerdas.

Correr a una mujer mientras está atada.



O...   ¿Ya sabías porqué disfruto tanto atando?

lunes, 17 de octubre de 2011

Fantasias de Syl (I)

La oscuridad absoluta de la habitación únicamente era interrumpida por la vacilante luz azulada de la noche que filtrada por algún resquicio de la cortina llegaba a formar figuras en los escasos elementos decorativos. Estaba agotada, los días caían pesados sobre sus hombros, el reciente insomnio que padecía no le permitía descansar lo suficiente. Siempre extrañaba su cama cuando dormía fuera de su casa, sin embargo aquella cama era cómoda acorde con el alto precio que había pagado por la habitación. Había elegido el hotel concienzudamente, cerca del centro de la cuidad en un barrio tranquilo, clásico, cuidado y con pocas habitaciones.
Tumbada el cuerpo le pesaba el doble, las sábanas se notaban recién puestas y bien estiradas, la sensación al meterse entre ellas era muy agradable, los ojos se le cerraban... Distintos pensamientos inconexos se iban solapando en su mente mientras ésta se apagaba volviendo el tiempo lento... y no fue consciente que ya se había quedado dormida.

Dormía tan profundamente que las primeras caricias se mezclaban con el sueño, la respiración regular del descanso comenzaba a tornarse entrecortada,  aún no había logrado abrir los ojos y esas manos anónimas se deslizaban sibilinas apretando ciertos lugares agitándole el cuerpo mientras su consciencia luchaba por despertar. Un dolor fino y agradable en sus pechos la sacó finalmente del mundo de los sueños, hacia pocas horas que dormía y en ese momento se encontraba totalmente desubicada, no lograba situarse dónde estaba pero antes de reconocer el lugar notó esa presencia detrás de ella. Seguí tumbada de medio lado y un cuerpo probablemente de hombre estaba recostado a su espalda, intentó girarse de manera instintiva sin embargo en ese momento la sujetaron fuerte desde atrás para que no pudiera hacerlo, volvió a intentarlo de manera más brusca pero cada vez la tenían mas fijada en la cama. Su mente trabajaba sufridamente por entender la situación, el miedo empezaba a tomar protagonismo, ya no sólo la sujetaban sino la tocaban a la vez, sólo logró chillar una vez mientras tenía la boca abierta un pañuelo metido con violencia ahogó cualquier futuro ruido.

Las manos eran grandes y fuertes, al forcejear por salir de la cama una de ellas la agarro por ambas muñecas retorciendolas reduciendo la mayoría de sus movimientos, la otra mano recorría su espalda hasta encontrar el borde de la camiseta que llevaba puesta. Se la subieron sin delicadeza. La mano llegó hasta sus pechos, los apretó con intensidad y lascivia bajando después para encontrar sus braguitas.  Forzaron por bajarlas encontra de las pataletas incotroladas que lo evitaban, sintió como le apretaban uno de sus muslos abriéndole sin remisión las piernas. Comenzaron apretándole el coño sobre las braguitas, al principio la sensación era difícil de asimilar sin embargo lentamente al sentir su coño completamente apretado unido a los movimientos que retorcían tanto su vagina como su clitorix se fue convirtiendo en una sensacion intensa y hassta agradable. Repuesta del primer shock reaccionó agitándose violentamente e intentaba separar sus muñecas para librarse de la mano que la sujetaban pero ese hombre era mucho mas fuerte que ella y cuanto más se movía sólo conseguía que aquellos dedos se clavaran más fuerte en su coño.  Entre sus intentos por chillar por encima del pañuelo que la ahogaba se escapaban algunos gemidos cortados, a la vez que su respitacion entrecortada se hacia más profunda. Al notar que su coño respondía a las caricias violentas apretaba las piernas para evitar que aquel hombre se diera cuenta de ello, sin embargo la humedad traspasaba levemente el tejido de sus braguitas, al palparlo agarraron uno de los hilos que componía su ropa interior y tiraron fuertemente de él. Los labios de su coño se abrieron sin compasión clavándose entre ellos las bragas que acausa de los tirones se habían convertido en una delgada línea que oprimía por completo su raja, del clítorix al agujero. Tenía el coño tan apretado que su fluidos se deslizaban en gotas hacia sus muslos en el momento que el hilo que sujetaba sus bragas cedió y se las arrancaron. Con un gemido de dolor, miedo y placer, que le hizo abrir completamente los ojos, su coño estaba desnudo, mojado y expuesto

Tenia la mente colapsada superada por una situación que no lograba asimilar, las sensaciones eran contradictorias y el cuerpo que estaba a su espalda se pegó al suyo,  el pecho del hombre se estrechó en su espalda y por primera vez pudo sentirlo con claridad. Le estaba separando las piernas mientras con la polla buscaba su sexo sin embargo ella por un instante se centró en aquel cuerpo que la estaba tomando. Era fuerte y grande, bastante más alto que ella, sus brazos definidos eran la contrapartida de un conato de barriga proveniente pero no desmesurada, intentó hacerse una imagen mental de su agresor, haciendo memoria con las personas que se había cruzado por los pasillos del hotel. Esos pensamientos se cortaron en el momento en la polla de aquel hombre la folló. La polla entró de una vez en su coño, era ancha y la folló entera, llegando a la pared final de su vagina a pesar de la resistencia. Fue una follada placentera, seguida de otras aún más violentas, todas entraban y salían enteras de su coño. Chillaba constantemente aunque no era consciente por qué lo hacía.
Placer, dolor.
Gusto, asco.
Violencia, caricias.
Un tirón de pelo la hizo encorvarse para que la polla entrara aún más y cuando la tenía completamente empalada no volvió a sacarla sino que los movimientos se hicieron circulares abriendo más su raja, su agujero. Sin saber porqué se relajó, dejando su cuerpo a la posesión forzada que estaba sufriendo. Disfrutando. El hombre se dio cuenta de que por fin se dejaba llevar y soltó sus muñecas, utilizando sus enormes manos para recorrer su cuerpo. Masajear sus pechos, pellizcando sus pezones erizados. Llegar hasta su coño para agarrarlo fuerte y facilitarse las folladas. Pajearla con dos dedos el clítorix.

Levantó levemente las caderas echándolas hacia atrás facilitándole las embestidas que cada vez eran más fuertes. El hombre aumentaba el ritmo de las folladas y la comodidad que ella le regalaba hacia la sensación de placer fuera más intensa para él. Perdida toda consciencia sobre la situación llevó sus manos hacia atrás acariciando el cuerpo del hombre primero de manera sigilosa, contorneándole la piel suavemente, llegando hasta sus nalgas, para acabar clavando sus dedos en ellas cuando el morbo venció sus últimos resquicios de cordura.

La corrió antes de eyacular dentro de su coño. Las paredes de su vagina se cerraron brutalmente entorno a la gruesa polla que la follaba y se fue cerrando más paulativamente hasta que el orgasmo concluyó. Con el coño relajado por la corrida pudo sentir con toda claridad y consciencia como la polla del desconocido se inflamaba y se contraía justo antes de eyacular. Corriéndose dentro de su coño haciendo que su vagina se llenara de calor y semen.

sábado, 17 de septiembre de 2011

16 de septiembre

16 de septiembre, el día que nacieron y murieron muchas cosas.
Murieron o las maté, nacieron o las trajiste...
Porque todo en la vida se puede observar desde distintos puntos.
Puedo recordar hasta los minúsculos detalles,
sin embargo ellos no significan nada,
meros destellos, espejismos de una luz muy brillante,
blanca, cegadora y caliente.
Luz procedente de una estrella extinta
que aún recorre el universo libremente.
Primera de muchas noches
quizás no suficientes, a muchos ojos demasiadas.
Noches de soledades compartidas,
que se deshojaron caducas
desde la belleza de sus flores blancas
hasta un tronco retorcido y viejo.
Porque todo en una vida se puede observar desde distintos puntos.
Teniendo razones para odiarte y para darte las gracias,
elijo darte las gracias.
Porque es difícil encontrar putas elegantes
y la suciedad puede ser muy placentera.
Porque me amaste como sólo tú sabes amar.
Y sobretdo por darme el 16 de septiembre,
porque todos debemos tener un 16 de septiembre,
un día donde nacen y mueren muchas cosas.

domingo, 3 de julio de 2011

Tu mirada me hace grande


Tu mirada me hace grande
Le dijo Eros a su "sumisa"
 A ver si así escuchas mis canciones ;)


No existe nada que pueda hacer más grande a un Amo que la mirada de su sumisa.
Ningún Dominante existiría sin esa mirada.
A Mí ninguna mirada me hizo más grande.

viernes, 1 de julio de 2011

Lijador de mentes

Existen finas líneas que funcionan como única separación entre conceptos radicalmente opuestos. Su importancia es inversamente proporcional a su grosor, saltar estas líneas no debería ser tan fácil.
Hace unos días alguien que sabe mucho de Mí pero no sabe que soy, o me considero Dominante, me dijo “eres un lijador de mentes”. Alguien capaz de ayudar a pulir los pensamientos y los sentimientos de los demás, de preparar a las personas para ser pintadas de un nuevo color.
Tengo que reconocer que la reflexión me llenó de orgullo, tanto por la persona que venía como por el significado en sí. Sin embargo al pensarlo me dio algo de vértigo. Porque dónde esta la línea que separa el ser “un lijador de mentes” a ser “un taladrador de mentes”, alguien que le de vueltas a las cosas hasta que abre un agujero donde meter sus ideas que probablemente estén equivocadas. Creo que la línea que separa ambas es demasiado fina. ¿Cuántas veces me la habré saltado aunque sea sin querer?
Creo que esa delgada línea roja es la que también separa a un buen Dominante de uno que no lo es, puesto que es un Dominante sino “un lijador de mentes”… el problema es cuando nos volvemos taladradores.
Sabio aquel que sepa distinguir la línea con claridad.

martes, 28 de junio de 2011

Leyendas bákaras (I): Tradición.

La noche era negra como correspondía a la época del año. Aún quedaban muchas noches para que la luna volviera a unir su luz a las de las estrellas que la rodean en un peregrinar por el cielo nocturno. Aquello perjudicaba la caza, no obstante no podía permitirse otra noche sin cazar, estaba siendo una estación de invierno muy dura. Por el día era prácticamente imposible logar una caza debido al desmesurado tamaño de los animales, por ello los guerreros bákaros se habían adaptado a la caza nocturna, sin embargo el extremo frío de las noches y la oscuridad estaba haciendo imposible la tarea.

Roma caminaba de vuelta al poblado por el sendero de los riscos, tras unos pocos pasos vería aparecer las chozas de piedra en lo profundo del valle, sólo quedaría bajar la colina empedrada para llegar a su casa. Quedaban aún un par de horas para el comienzo de la salida del sol y la negritud era abominable, el pueblo se intuía al fondo paso a paso, a aquella hora una única luz permanecía encendida en medio de la noche dormida, la de su casa. Le gustaba aquella visión, esa luz significaba que Ann le estaba esperando despierta. Hacía más de tres años que la había tomado y todas las noches de caza le esperaba al lado del fuego mientras se arreglaba el pelo y lo ensartaba creando una enorme trenza que le llegaba hasta las caderas.
Bajando por aquel sendero empinado decerleró el ritmo, no por lo complicado del terreno, sino por el placer de degustar esa noche de invierno, una de las pocas en las que no había ventisca y podía respirar pausadamente ese aire helado hasta el fondo de sus pulmones, era muy agradable sentir como el frío del aire le aguijoneaba el interior para acabar calentándose paulatinamente dentro de sus pulmones, era una sensación que le destensaba el cuerpo entumecido por la tensión de la caza.
Llevaba colgadas en su espalda dos piezas pequeñas que pobremente valdrían para la comida de un día, no era suficiente. No se consideraba mal cazador sin embargo por su condición era muy difícil que le invitaran a una partida conjunta, para la caza de grandes bestias eran necesario como mínimo cinco hombres. A Roma sólo le habían permitido dos veces la oportunidad de participar en una caza verdadera.
Había pocos momentos en el día de un bákaro en los que tuviera tiempo para pensar y en todos ellos el cansancio se convertía en un enemigo grandioso. Para Roma aquel tiempo de vuelta a casa era su única oportunidad para concentrar toda su atención en sus pensamientos que normalmente le llevaban hasta su padre. Un romano que había llegado a ser general antes de tomar a una mujer bákara e instalarse el pueblo, aunque no sabía cómo llegó a darse esa extraña situación.  Los romanos eran el peor de los enemigos del pueblo bákaro. El único pueblo ante el que habían perdido una batalla, y probablemente una guerra. Los bákaros eran considerados como una tribu de bárbaros por la sociedad romana y tras su intento de asimilación dentro del impero, ante la negativa del pueblo bákaro, les habían expoliando hasta que las siete tribus se habían reducido a dos que acabaron asentándose en ese paraje remoto lejos de la mirada y la mano romana. La cultura del pueblo bákaro estaba basada en principios de dominación masculina, la mujer bákara era criada y educada para satisfacer el servicio y el uso del hombre al que decidicera entregarse, esa era su gran decisión libre o decisiones puesto que una mujer por el hecho de pertencer a un hombre no tenía que hacerlo de por vida. Existía una ley sobretodos las leyes del pueblo bákaro, la ley de arrebatamiento. Por ella un hombre podía tomar a una mujer “tomada” he incluso quedársela siempre bajo el consentimiento y deseo de ésta, y a través de una serie de deberes. 

Un vallado de madera rodeaba al poblado, que  como todos los asentamientos bákaros tenía una forma elíptica con las chozas desperdigadas sin mas orden aparente que las tres plazas circulares que se situaban siempre perpendicularmente colocando la más pequeña en el  oeste del poblado y la mayor en el este. A través de ellas se alineaba los pueblos siempre de la misma manera. Al cruzar el vallado todo se sentía muy distinto, el abrigo de las chozas y el calor que se desprendía de su interior creaba una atmósfera hasta agradable en medio de ese lugar inhóspito. El olor de los calderos hirvientes y el alcohol caliente se impregnaba en las paredes y los techos. Quietud, a esa hora Roma podía darse cuenta de esos pequeños detalles, en ese momento ya divisaba su casa, aunque había algo extraño. El fuego iluminaba la estancia principal, su luz se escapaba por el ventanuco cercano a la puerta, pero proyectaba una sombra que no era capaz de identificar, muy abrupta para ser la sombra de Jann y sobretodo demasiado movimiento.
Llegó hasta la puerta, el sonido, el olor.
Para comenzar el ritual de arrebatamiento el primer deber era tomar a la mujer delante del hombre que la poseía. El cuerpo de Jann era extremadamente hermoso y en esa postura aún lo era más, la había visto en muchas ocasiones así pero nunca desde esa perspectiva. La larga trenza de Jann a medio hacer enredada en una mano que tiraba de ella fuertemente para hacerle mantener la cabeza erguida dificultándole respirar a causa de la fuerza y la postura que forzaba su cuello hacia atrás. Jadeaba. La espalda curvada alternaba su suavidad natural con pliegues rojizos algunos incluso inflamados, un par de ellos ya tornaban al color mas oscuro que una piel azotada puede ofrecer. La habían azotado abundantemente con una vara de caño en la espalda. Gemía. Sus muñecas sujetas por una cuerda de esparto anudada sin ningún tipo de compasión comenzaba a desgarrar su piel debido al roce violento que provocaba cada embestida. A cuatro patas por supuesto, no exitía otra postura capaz de lograr que Jann gimiera a tan alta intensidad.
En el segundo deber se basaba el triunfo del arrebatamiento, lograr el orgasmo de la mujer. Por ello, Roma tenía la obligación de presenciar toda la escena hasta que uno de los dos corriera. Si el hombre lo hacia antes, no tendría ningún derecho sobre la mujer y se colocaría a los pies de Roma para que le cortara la cabeza. Si era su mujer la que se corría primero dejaría de pertenecerle pasando a servir al hombre que la había domado y Roma tendría que vivir en el poblado bajo la vergüenza o marcharse para siempre. No atravesó la puerta, con los ojos fijos en la escena que tenía delante probablemente ni pestañeó. Situaciones como esa era usuales dentro de una comunidad bákara, sin embargo ningún irrumpido había permanecido impasible, Roma no se movió ni un ápice, no llevo la mano a su lanza y ni salió maldición alguna de sus labios.
Delante de él Jann estaba colocada a cuatro patas con los tobillos atados a una lanza que mantenía sus piernas muy abiertas y su coño totalmente dispuesto. Sólo mantenía la punta de su polla dentro de ella, haciendo que el agujero de su coño se mantuviera abierto y provocándole el ansia femenina de sentir una embestida que parecía cercana pero nunca llegaba. Mientras la mantenía en esa postura golpeaba sus nalgas con la mano derecha completamente abierta, sacudidas secas y certeras en las que el fino dolor se trasmitía por todo el cuerpo. Golpeaba una nalga con la palma de la mano y la otra con el reverso en el movimiento contrario de la mano de manera tan seguida que podían ser el mismo movimiento. Le pegaba cada vez más fuerte de esa forma en la que el dolor se va convirtiendo paulatinamente en placer, ambiguo e incontrolable.
Comenzó a penetrarla, lo hacía indistintamente en ambos agujeros, pasando su polla de uno a otro con fuerza. Embestidas en las que metía su polla por completo en coño y después en el culo de la postrada mujer. Cuanto más fuerte era la follada más retorcía su pelo hacia atrás, Jann jadeaba ahogada a la vez que seguía recibiendo golpes en sus nalgas amoratadas con las manos desnudas, unas manos grandes y rugosas.
Jann no aparto en ningún momento la vista del punto en la que había fijado, su cuerpo reaccionaba y los fluidos le caían por los muslos. La espalda le ardía a causa de los azotes pero ese calor sólo agravaba el placer proveniente de sus nalgas. No era la mejor follada de su vida pero la estaban follando sin ninguna contemplación, se sentía usada y puta. Nunca se había sentido tan sucia. Sabía que Roma estaba allí aunque en ningún momento le mirara. Sabía que le había traicionado.

Cuando su mujer se corrió Roma no recogió ninguna de sus pertenencias, se dio la vuelta y caminó. Había cumplido la ley, su mujer ya no le pertenecía. Llegó sin vacilar al redil de los caballos, busco un semental de pelo negro y crines aún mas oscuras, era el más veloz de los caballos de la aldea. No salió al galope aunque la mañana aparecía detrás de las montañas, gran parte del pueblo era consciente de lo que había pasado y le observan detrás de las ventanas.

martes, 7 de junio de 2011

Cuando el amor no es suficiente

Hay veces que el amor no es suficiente. Creer esa afirmación significa dejar de creer. Yo estoy a punto de dejar de creer.
No ceso de buscar maneras de distraer mi mente. ¿Qué hay oculto en mi mente, que ni ella misma me deja encontrarlo?
Si tú has dejado de creer, ¿por qué lloras de esa manera?
Nadie llora como tú, es tan doloroso sentirte llorar que es hasta bello.
Cuando lloras pareces consciente de que el amor sí es suficiente.
Cada lágrima que derramas es un miedo, si sigues llorando te los sacarás todos de dentro. Pero existe otra manera.
Me resulta fácil seguir a mi corazón, no me cuesta seguirle hasta las tinieblas, dónde todo se vuelve incomprensible.
Allí me siento a observar como Ender.
En lugar de escurrir tus miedos en lágrimas pásalos por el filtro de mi corazón.
Confianza y amor. Eso es lo que soy.
Sólo existe un lugar donde debes estar. Dónde reside la felicidad.
La tranquilidad no es la felicidad directamente, es el camino que te lleva hasta ella.
Son los pequeños detalles, esos que ensalzados se llaman vida los únicos capaces de acercarte la felicidad hasta que puedas cogerla con tus propias manos.
Te quiero porque eres tú.
Te quiero porque nuestros pequeños detalles me hacen sonreír siempre.
Te quiero porque me acercas la felicidad.
Pero si el amor no fuera suficiente, de qué valdría que Yo te quisiera tanto.
No aspiro a que el mundo sea justo y sea la justicia la que de le valor a mi amor.
Soy Yo el que hará que valga.
 
¿Me vas a dejar intentarlo?

lunes, 30 de mayo de 2011

Sobredimensionando

Hace poco que me di cuenta de que en ciertos momentos he sobredimensionado el Bdsm. Lo cuál considero que ha sido el mayor error que he cometido dentro de mis experiencias con el Bdsm. Y como Yo, creo que hay muchas personas que practican el Bdsm que lo sobredimensionan.

He hablado, leído y escrito sobre muchos temas que muestran esa sobredimensión de la que quiero hablar. Con esto no busco herir a nadie, mucho menos atacar en concreto a alguien ni en de manera genérica a aquellos que no piensen como Yo. Pero después de pensarlo y vivirlo, me parece que llevar el Bdsm a algo más que un gusto por unas prácticas, un juego, una búsqueda de placer o simplemente una forma de sexo y/o amor, es sobredimensionar algo que debería ser más simple.

¿De verdad es el Bdsm algo más que dos personas que se juntan para darse placer mutuamente? ¿Es el Bdsm algo más que una relación entre dos personas iguales pero distintas?

Vida y Bdsm era el título de una entrada que nunca llegué a terminar hace ya bastante tiempo, cuando Yo era otro. En ella quería hablar de lo complicado que era unir el Bdsm a la vida normal de pareja y todo lo que ha ésta le rodeaba. Ahora veo que estaba totalmente equivocado en mis pensamientos, era Yo el que lo hacia complicado. Sobredimensionando los conceptos del Bdsm.
Divagamos mucho sobre cuestiones como que una sumisa debe sentirse siempre sumisa dentro de sí misma; que siempre debe estar dispuesta y conforme para con su Amo. Que el máximo placer de una buena sumisa es el placer de su Amo… En el otro extremo hablamos de la doma. Un Amo doma a su sumisa en sus gustos y sus deseos. La educa como perra. Todo esto me parece muy trascendente, hasta poético. Sin embargo, no veo más que dos personas que tienen gustos equivalentes pero contrarios que se encuentran, se unen y se dan placer, e incluso puede que amor. Toda sumisa se entrega porque desea hacerlo y ofrece a su Amo lo que le da placer ofrecerse. Por ello una sumisa no se entrega a cualquiera, sino  a aquel que cumple sus deseos y expectativas, al igual que una mujer vainilla sólo se acuesta con aquel hombre que le da esas mismas cosas. Cuando deja de sentir esto la relación se acaba, como cualquier relación entre dos personas, ni más ni menos. Ni estaba más o menos domada esa sumisa, ni se portó mejor o peor. Sólo el amor o el deseo se esfumaron. El Bdsm es una forma de sexo, una forma de maquillar los deseos oscuros que ciertas personas llevamos dentro. Como en todas las relaciones las personas se amoldan las unas a las otras. Y los Amos también nos amoldamos, cada uno en su propia experiencia y forma, a nuestras sumisas. Porque… ¿sino fuera así sería Bdsm o entraríamos en violencia sin importar el sexo de los implicados? El Bdsm es una forma de poner nombre al amor, como existen muchas. El Amo protege a su sumisa y ésta le engrandece. Pero también sucede lo inverso y el Amo necesita ser protegido y la sumisa ser engrandecida, aunque para aquellos que sobredimensionan el Bdsm esto esté fuera de lugar.

Yo no quiero compartir mi vida ni mi tiempo con una mujer que no sea capaz de enseñarme cosas, de callarme en cierto momento y demostrarme que estaba equivocado, quiero a alguien que sepa más que Yo de muchas cosas. Incluso obedecerle si lo considero oportuno. ¿Una mujer que haga eso podría ser considerada Mi sumisa? En la teoría la respuesta sería no, pero la realidad me dice SÍ, siempre que ella se sienta Mía como Yo deseo que lo sea y disfrute de ello más que de cualquier otra cosa.

Vida y Bdsm... algo tan sencillo y tan complicado como que dos personas se amen o se deseen y sean complatibles.


Puede que muchos de los que leáis esto, si es que se puede considerar muchos a los que pasen por este rincón perdido, os dierais cuenta de esto hace mucho y no aporte nada nuevo, para otros puede que mi conclusión acerca del Bdsm sea una aberrancia y casi un insulto.  Sin embargo, en mi opinión, todo más allá de este punto es puro teatro.

jueves, 26 de mayo de 2011

Nuestro amor eterno, nuestro amor absurdo

Nuestro amor eterno, nuestro amor absurdo es silencioso, que no mudo, escrito en un idioma que ni nosotros conocemos a veces. Nadie puede transcribirlo, nadie puede entenderlo. Seguimos en silencio hacia delante porque ninguno daria la vuelta jamas, no por orgullo. Por carácter. En las noches miramos al cielo simplemente porque es el mismo cielo que esta mirando el otro. El tiempo pasa lento desde que no estás, a mi lado, xq estar siempre estas. Y estoy.  Pero el tiempo pasa, nunca se parará, ni en nuestras mentes.

Nuestro amor eterno, nuestro amor absurdo es exclusivo, existen muchos tipos de amor, sin embargo a  nosotros nos no servía ninguno y hemos creado uno propio y único.  Con la base de placer y dolor, cimentado con la distancia y sin tiempo, lagrimas eternas y sonrisas sinceras, miradas de kilómetros de palabras,  abrazos de despedida y promesas incumplidas. Durante mucho tiempo pensaba que a este amor nos había llevado la vida, que a veces es una mierda, pero no. Este amor, esta situación no existía antes de nosotros, ni sin nosotros. No es cuestión de la vida o las circunstancias, somos nosotros.

Nuestro amor eterno, nuestro amor absurdo es posesivo, porque tu eres Mía, y fijate bien, está escrito con la mayúscula. La mayúscula que te convierte en una perra lasciva que por mucho que se la follen siempre pertenecerá a Mis Manos capaces de marcarte el alma a golpes secos y , así como penetrarte hasta convertirte en una puta profunda y abierta.  Esta posesión no acaba en la perra, es mucho más fuerte en la mujer, permíteme que en esta ocasion te divida en partes, porque tu corazón es aun más mío que tu coño. Mientras que en el segundo pueden entrar otros, en el primero solo Yo campo a mis anchas. Se que estoy hablando demás y por los dos pero eso es lo hacen muchas veces los Amos. Y no se me olvida, ni mi orgullo de Dominante me impide decir que soy tuyo.  Poseído por la posesión que te ejerzo, por tus ojos que cuando suplican no pueden ser mas hermosos. Por tu coño, porque todavía no entiendo porque tengo que correrme en otros lugares. Te pertenezco al no necesitar más de un segundo para embelesarme en tu belleza contenida en una sonrisa que sólo aparece a ratos. Sellado en unos besos de boca tan abierta con los que seríamos capaces de engullirnos, sólo por el placer de estar más cerca el uno del otro.

Nuestro amor eterno, nuestro amor absurdo es irreal, que no imposible como te esfuerzas en convencerte, falto de la realidad del roce y la brutalidad del sexo. Irreal en las noches solitarias que cada vez son más comunes, tan intenso es el recuerdo de lo real que las lágrimas también son reales, los orgasmos no. Es tan corta la distancia entre la irrealidad y la realidad que me parece mentira que exista, el problema es la profundidad que el vértigo nos vence. Está en nosotros amor, la irrealidad de volver a besarnos. Bien sabemos, los dos, que una simple chispa de realidad nos volvería a unir, para siempre? Que tierna es la irrealidad y que complicado lo real. Nunca fuimos totalmente reales, ni cuando casi nos besábamos a diario. Y la única manera de vivir esta basada en la realidad, todo lo demás es un cuento. 

Nuestro amor eterno, nuestro amor absurdo es lascivo, tanto como lo es mi mente perversa y sádica; tanto como lo es tu mente emputecida y masoca. Porque el amor entre un cabrón y una puta no puede ser de otra manera. Lascivos son nuestros actos mutuos en cada momento y así será hasta el final de los tiempos, porque tú no sabes vivir de otra manera y Yo elegí ésta.

Nuestro amor eterno, nuestro amor absurdo es doloroso, no por los azotes y la cera. El dolor físico es placer en Mis Manos, en tu cuerpo. El dolor, pasado o presente, siempre estuvo dentro de nosotros. A ti te fue difícil esquivarlo, a Mi imposible. El dolor, como todo en esta vida, termina desapareciendo, sin embargo hay algo que le diferencia de todo lo demás. Las cicatrices.

Nuestro amor es eterno, se demuestra día a día, mes a mes y sobre todo noche tras noche. Eterno en el tiempo y en el interior de cada uno de nosotros, porque el mundo creyó habernos vencido hace mucho. La eternidad que te proporciona la dominación/sumisión de corazón y creencias, cuando sobrepasa el juego, las vivencias, necesidades o el placer... son sentimientos y sensaciones puras. La pureza es eterna cuando nada puede mancharía. Si, hablo de pureza en el sadismo y en el masoquismo, el color negro brillante es bello e igual de puro que el blanco, aunque es oscuro, totalmente oscuro.
Nuestro amor es absurdo porque nunca debió haber nacido, porque no existía ningún motivo. En mi tarro de las cosas absurdas, ese que nunca se llenará, está coronado por ti. Es tan absurdo como todo este escrito, como su creador, como todo lo que vivimos. Porque Yo soy el rey de los absurdos, ese es mi pecado y mi muerte. Caeré una y mil veces en misma piedra, sin embargo siempre iré por el camino que a Mí me de la gana. Es totalmente absurdo orque para que sea perfecto ambos tenemos que ser uno, cada uno en un lugar,  iguales ante nuestro amor eterno, nuestro amor absurdo. Sin embargo esto sí que es imposible.

FIN

lunes, 16 de mayo de 2011

Estocolmo


Estocolmo es una cuidad de colores


Tranquila como el agua que la surca


Yo fui allí a escapar


Sin embargo, es imposible escapar de uno mismo...
... siempre te encuentras


Y acabé en una isla perdida, creo que se llamaba Grinda. Simplemente pensando en ti







viernes, 29 de abril de 2011

Como cuando jugabamos a las canciones

A veces nos gustaba jugar a las canciones, es un juego sumamente básico pero sin embargo no se puede jugar con cualquiera, es tan fácil como sentarte con alguien, CONTIGO, poner una canción y que cuando se acabe tu acompañante, TÚ, ponga la siguente y así hasta que algo interrumpe porque sino el juego no acabaría nunca, porque las miradas entre dos personas que estan enamoradas nunca se acaban.

Hoy me he levantado con ganas de jugar a las canciones, sé que no estás en mi sofá y lo que es peor, que probablemente nunca vuelvas estar aquí sentada conmigo, pero aquí tienes mi canción. Tú bien sabes que siempre hay una que ronda más que las demás, esta es la última.

miércoles, 27 de abril de 2011

5. El mejor regalo de cumpleaños

Hace relativamente poco fue mi cumpleaños. A Mi me gusta cumplir años, disfruto de la sensación de movimiento temporal, nunca he sabido estarme quieto. A su vez aunque pueda parecer raro soy un hombre de rutinas, las creo casi de manera instintiva en todo y en todas las personas que me rodean, dicen que son aburridas sin embargo para Mi son mis clavos ardiendo en el caos de vida en la que siempre acabo eligiendo vivir.

Son las rutinas las que definen una vida, quién y qué eres. Sin embargo son los días que se escapan a ella los que le dan sentido, por eso no se deben menospreciar los días especiales que te regala el año, por eso y porque siempre hay algo que celebrar todos los años hago una fiesta el día de mi cumpleaños. Yo nací el 15 de abril a las diez de la noche y casi nací muerto, mi madre siempre me dice que esa fue la primera vez que vio llorar a mi padre.

Este año el mejor de los regalos parecía ser una tarta de tres chocolates, sin embargo había mucho detrás de esa tarta. Y el mejor de mis regalos acabo siendo la tranquilidad, aunque ese regalo se va convirtiendo en rutina con el paso de las noches en las que no te cortas en robarme el sueño y la sonrisa. Me regalaste algo que siempre había tenido, que perdí y buscaba. Me hiciste recordar lo que de verdad es importante, dejando fuera el teatro, las metáforas, la mentira... Me envolviste la tranquilidad en abrazos , me la regalaste y supe perfectamente que estaba dónde tenía que estar y con quién tenía que estar.

!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

sábado, 2 de abril de 2011

Eres mi Tormenta de Arena

Te he perdido entre la gente,
te he adorado y te he odiado,
y en el fondo sabes bien
que en los peores momentos
llevas dentro un ángel negro
que nos hunden a los dos.


Y cuando llega el nuevo día
me juras que cambiarías y
pero vuelves a caer.
Te dolerá todo el cuerpo,
me buscarás en el infierno
porque soy igual que tu.


Todo lo que siento por ti
solo podría decirlo así.
Todo lo que siento por ti
solo sabría decirlo así.


Para viajar a otros planetas
por corrientes circulares
te di una cápsula especial.
Pero ahora tu cabeza
es una tormenta de arena
y cada noche una espiral.


Y cuando llega el nuevo día
me juras que cambiarías y
pero vuelves a caer.
Te dolerá todo el cuerpo,
me buscarás en el infierno
porque soy igual que tu.


Todo lo que siento por ti
solo podría decirlo así.
Todo lo que siento por ti
solo sabría decirlo así.






                                       Dorian

miércoles, 30 de marzo de 2011

Irrealidades

(se recomienda escuchar esta canción mientras se lee este post)


 

El tiempo pasa, dando enormes pisotones, pudiendo aplastar cosas o dejarlas intactas. Sobre los recuerdos provoca un efecto curioso, los vuelve irreales. Les coloca capas encima hasta que llega un día en el que al evocar dicho recuerdo no nos reconocemos, es como si nada de lo que pasase en él hubiese sido nunca real.
Se crea una lucha brutal entre la memoria y mente. La memoria te trae situaciones, personas y palabras de tu vida, mientras tu mente no distingue lo que fue real de lo que simplemente fue impostado.
Los recuerdos al pasar el filtro de la mente son evaluados bajo el enorme pisotón del tiempo y no te reconoces pero eres tú, fue real.
¿Realmente esas palabras eran mías?
Fue real que amaste de esa manera a esa persona, pero tu mente no lo ve así
Lo peor de todo, ¿sentí esas cosas que mi memoria dice?
Porque vivirlas las viví.


Cuanto más tardío es el recuerdo suele provocar, en muchas ocasiones, más vergüenza. No se trata de que la elección que tomaras fuera equivocada o acertada sino de que la tomaste. Nuestro tiempo en el mundo es ínfimo, todo lo contrario que dentro de nuestra cabeza. La memoria no es capaz de guardarlo todo, sin embargo no encuentro lógica al modo de elección y sobretodo da rabia que cuánto más quieres eliminar algo, más profundo se coloca. Y más irreal se vuelve.
¿Por qué es todo tan lejano cuando es simplemente mi vida?
Existe la posibilidad de que existan varios Yos que nazcan vivan y mueran dentro de mi  vida…


Nos vemos de niños en nuestra mente e intentamos reconstruirnos con esa edad. Dónde está la forma en que funcionábamos. ¿Y los reyes magos? Te miras a los ojos. Es irreal. El pasado y el futuro son muy parecidos, ninguno de los dos existe, sólo que uno lo conocemos y el otro no. Ambos son alterables y volubles de igual manera. El pasado no está acabado, continúa siempre.  A la memoria es fácil que se agarre el dolor, es su manera de no soltarnos, de hacer su trabajo. El dolor tampoco se escapa al paso de la irrealidad, aunque la reacción química entre ambos no siempre es la misma, se grandifica o empequeñece.
Acaso no sentís ganas de llorar.
¿Da más miedo el futuro o el pasado?
Cada momento que se convierte en recuerdo te cambia aunque parezcas inalterable.


Hay personas con la mente ordenada, sin embargo la memoria por mucho que intentamos ordenarla nunca lo conseguiremos. Los recuerdos se colocan en el orden que quieren y no los podemos tocar, no guardes nada que no quieras perder dentro de tu memoria.  Las personas son el elemento que se vuelve más irreal en nuestra mente, las alteramos a gusto y concierto llevándolas a donde quisiéramos que estuvieran, muchas veces las magnificamos sin criterio y otras muchas más las empobrecemos vilmente. Porque a través de la memoria y en nuestra mente todo es irreal.
No, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no ,no ,no ,no.
¿Hay algo objetivo en este mundo, el cúal no podemos observar desde otro lugar que no sean nuestros ojos?


Hasta aquí puede parecer que nuestra memoria no tiene nada bueno, sin embargo que placer es recordar anécdotas con alguien que amas. Me encantaba escuchar a mi abuela. Es alegre saber que aunque las cosas se acaben no desaparecen porque están en un lugar, que encima es tuyo.
Muchas veces se me saltan las lágrimas sólo con pensar en ti.
Aunque no me ames, una parte de tu amor ya es Mio.


Sabéis, en mi cabeza normalmente suena un piano y realmente no sé si lo que he escrito anteriormente es algo común al todos los mortales o es algo propio y exclusivo de mi cabeza. Me gusta pensar que esas grandilocuentes filosofadas son humanas y no Erosianas…


martes, 29 de marzo de 2011

10 Años

Hoy hace diez años que descubrí el amor de persona mayor, aquel que te lleva a sacrificarte por el otro y darle todo lo que tienes, tú mismo. El único sentimiento capaz de convertir a dos personas en una. Pena me da el que no haya sentido ese tipo de amor, pues aún no sabe lo que es ser una persona completa.

La primera vez que lo sentí fue en  una playa desierta, amaneciendo, todo tenía como un tono azulado leve aunque ya lo recuerde como desenfocado. A partir de ese momento mi corazón comenzó a sentir de una manera nueva, ya no sólo sentía por mí, sentía por los dos. Todo esta desenfocado en esa playa pero me queda el calor que desprendía su cuerpo y las palabras que nunca se llevará el viento.

Existen muchas facetas dentro de un sentimiento tan grande sin embargo de todas ellas me quedo con el sacrificio. Probablemente no es la parte más bonita, ni la más vistosa, pero es la más importante. Sacrificar cosas tuyas propias por otra persona y que la sonrisa siga inquebrantable en tu boca es la máxima expresión de amor que una persona puede regalar a otra. Esa chica sacrificó muchas cosas de su vida por mí y tengo que reconocer que no siempre fui digno de ello, sin embargo ella nunca perdió la sonrisa mientras estuvo  de mi mano.
  
No  me gusta mucho escribir en primera persona pero hoy hace una década que me hice mayor de edad en el amor, y aunque ella ya no esté en mi vida siempre estará dentro de Mí, porque guardó allí un pedacito de su alma y Yo lo seguiré cuidando como lo he hecho durante diez años.

Gracias, aunque nunca serán lo suficientemente grandes.

jueves, 17 de marzo de 2011

No todo es Bdsm

No todo es Bdsm, muchas veces pienso que ni siquiera es importante. Hoy, esta noche, echo de menos un olor. El olor de un abrazo, algo mucho más importante que el mismo placer de un orgasmo, el lugar donde perderse del mundo. Ahora mismo carecen de valor muchas palabras a menudo empleadas, mi mente reclama otras cosas.

Cuando más necesitaba perderme del mundo lo encontré en la oscuridad de unos ojos cerrados y el silencio de esas horas que no son ni mañana ni noche, en lo más recóndito del cuello de una mujer. Podría escribir que se paró el tiempo y el mundo, pero no fue así. Fue lejano a la retórica, dos personas, una noche y una cama, por eso es bonito.

Hoy es una noche rara, no añoro a una perra, ni a una puta, ni tan siquiera a una sumisa. Quiero una mujer, dormir con la cabeza apoyada sobre su olor.  

sábado, 12 de marzo de 2011

El Dominante de las navidades futuras


-       Sigues si mirando hoy por Internet al final vas a descubrir el B dsm..
-       ¿Cómo perdona?
-       Nada olvídalo, nos vemos…
No, ya que estoy aquí. Mira que si sigues indagando por ese Chat y esas páginas vas a acabar en una que habla de B dsm y te va a picar la curiosidad.
-       Pero… ¿tu quién eres?
-       Uff, complicado soy tú, lo que pasa es que vengo del futuro
-       ¿Cómo?
-       Poco y difícil de explicar. La cosa es que he venido a avisarte de que si sigues por ese camino vas a descubrir el B dsm.
-       El B dsm…. Mmm… ¿y eso es malo?
-       No, no nada es malo.
-       Entonces… ¿por qué venir a avisarme?
-       Porque si el B dsm entra en tu vida descubriras que eres Dominante.
-       Espérate, ¿los dominantes son esos del látigo y el cuero?
-       Sí, vas a ser uno de esos. (rie)
-       ¿Tu estás loco? Qué cojones voy a ser yo un loco de esos
-        Probablemente ya lo seas de cierta manera pero quizás lo mejor fuera que no llegaras a saberlo.
-       ¿Por qué?
-       Cuando descubras y entiendas que eres Dominante cosas dentro de ti cambiarán, tu visión del sexo será radicalmente diferente y no habrá vuelta a atrás.
            Te volverás sádico, aunque probablemente ya lo seas, disfrutaras del dolor  y                                                                           la humillación de la mujer que está a tu lado. Incluso aunque la ames con locura, desearas azotarla hasta que sus nalgas se vuelvan moradas.
            Irás perderás gran parte del gusto por el sexo convencional hasta llegar a dudar si realmente te gusta follar o sólo disfrutas usando a una persona, dominándola. Llegara un día en que llegues a plantearte si puedes disfrutar simplemente teniendo sexo convencional.
            Habrá muchos momentos en lo que te sientas extraño contigo mismo y un nuevo tipo de soledad te embriagará.
-       ¿Me gustará el dolor?
-       Disfrutarás infinitamente de dominar a una mujer, azotarla, verter cera  caliente sobre su piel o hacer que se masturbe en tus pies. Te gustará pegarle fuerte con tu mano desnuda o con fusta y atarla a una mesa para hacerle chillar de placer y dolor. Así será como te pongas duro de verdad. Así serán tus mejores orgasmos.
Harás que la mujer que amas te obdezca en las perversiones que se te pasen por la cabeza y la convertirás en tu puta.
-       ¿Pero la amaré de verdad?
-       Como no has amado a nadie.
-       Eso es bueno.
-       Sí.
¿Estás entendiendo lo que te digo?
-       No del todo. Pero… tú eres yo, ¿no?
-       Sí.
-       ¿Soy feliz siendo Dominante?
-       (Sonrisa de medio lado) A veces resulta duro. Si ya es complicado alguien cómo pareja, no te imaginas una sumisa… Hay circunstancias, pensamientos y deseos que no se pueden compartir con casi nadie. Y a veces padezco algo que llamo la soledad del Dominante.
Sí soy feliz.
Aprenderás a respetar mucho más a la mujer. Entenderás valores y posiciones lejanos a los tuyos. Mirarás con otros ojos la vida y el sexo. Te obligarás a ser mejor cada día. Alcanzarás sensaciones únicas que te llenarán de placer y lascivia. Conocerás gente interesante a cambio otra un tanto repugnante. Serás capaz de hacer arte con cuerdas. Tendrás orgasmos morbosos y te correrás como nunca antes.
Pero es muy difícil ser Dominante. Dominar a alguien es una grandísima responsabilidad. Mantenerte firme y seguro a la vez que no dejar de ser un hombre pachanga… Amar pegando es una sensación compleja que a veces cuesta asimilar y no todo el mundo sabe como aceptar.
Controlarte, siempre…
-       Entonces… ¿para qué habías venido?
-       Para avisarte por si acaso no querías vivir esto.
-       Sabes que… espero descubrir algún día que soy Dominante. (sonrisa de medio lado)



lunes, 7 de marzo de 2011

Blue valentine


SECUENCIA 10

Cindy cuida de su abuela ambas están sentadas en la cocina tomando café, Cindy en una silla de la mesa y su abuela en la silla de ruedas

Cindy : ¿Qué se siente al estar enamorado?
Abuela: Oh! Querida… no creo haberlo averiguado.
Cindy: ¿No lo estabas del abuelo?
Abuela: Quizá un poco… al principio
            No tenía ningún sentido para mí como persona.

A partir de aquí las voces de Cindy y su abuela se escuchan en off sobre imágenes de una comida normal de la famila. El padre llega a la casa se sienta a la mesa. La situación se nota tensa. Se comienza  servir la comida.

Abuela: Tienes que tener cuidado con eso.
              Debes tener cuidado de la persona que eliges para enamorarte…
              ¿Vale la pena?
              
Cindy: No quiero ser como mis padres.
            Supongo que se habrán amado alguna vez, ¿no?
            Habrán dejado luego todo atrás para tenerme.

Cuando la madre de Cindy sirve la comida a su padre la situación se vuelve más tensa. Terminando con gritos del padre que tira la comida. Cindy calla temerosa en su silla. La madre solloza.

Cindy: ¿Cómo confias en tus sentimientos, cuando pueden desaparecer así de fácil?
Abuela: Cin, la única manera de saberlo es teniendo ese sentimiento.

Bateria de imágenes de la vida normal de Cindy con la voz de la abuela en voz. Clase en la universidad, viajes en tren... el día a día

Abuela:  Eres una buena persona cariño.
              Tienes derecho  decir… sí confío.
              Yo misma confié.





SECUENCIA 12

Cindy se dirige a su casa llevando a su abuela en la silla de ruedas. Se cruza con ellas su exnovio, intenta comenzar una conversación ella. Ella pasa de él hasta llegar a su casa y cerrarle la puerta en sus narices.
Pasamos a Dean (conoció a Cindy hará unas semanas en el centro de ancianos donde vive su abuela, él le dio su teléfono pero ella nunca le llamo) que esta sentado al lado del rio se ve Nueva York de fondo.

Dean en off: No sé, creo que simplemente dejó de pensar en él.
                     Pero yo no puedo.
                     Creo que he visto demasiadas películas de amor a primera vista, entiendes?

Pasamos a Dean en un descanso de su trabajo como mozo en mudanzas. Está sentado en el camión hablando con uno de sus compañeros.

Dean: ¿Crees que puedes amar a alguien así, sólo con haberla visto una vez?
           La cosa es que sentí como que la conocía de siempre.
           ¿Has sentido esa sensación?
Compañero: ¿La de haberla visto y sentir que ya la conocía?
Dean: Sí
Compañero: Es una sensación.
                     Pero la realidad es que no la conoces.
Dean: Sí, probablemente…
Compañero: Exacto.
Dean: Siento como que sí, igualmente…




Una gran película que no se ha estrenado en España, no apta para aquellos que no quieran derramar un par de lágrimas.